Pagos de Negredo, la bodega palentina situada en pleno corazón del valle de Arlanza (DO Arlanza), ha apostado estos últimos años por un proyecto de recuperación de viñas viejas -más de 60 años- de la zona del Cerrato palentino, con el objetivo de conocer cómo eran los vinos que se elaboraban antiguamente en estas tierras y honrar así a la gente que ha hecho posible que estos viñedos perduren hasta nuestros días.
Quinta Negredo Coto Redondo 2014 es el resultado del trabajo y la ilusión que la bodega ha puesto en esta iniciativa. Es un vino elaborado a partir de un ensamblaje de tres variedades de viñas viejas de diferentes pagos, algunos con más de 60 años de vida, y suelos de variada naturaleza que le aportan distintos matices y características.
Como explica el enólogo Raúl Tamayo “los suelos que componen este ensamblaje son de diferente naturaleza, el suelo de caliza del viñedo Quinta Negredo con el que hemos elaborado el 30% del vino nos aporta mayor estructura. La zona más arenosa de uno de los pagos que hemos recuperado, El Quintero, proporciona al vino redondez en boca, y los viñedos con mayor componente de gravas, como son El Negredillo y El Rincón, ambos con más de 60 años de vida, nos ofrecen mayor riqueza aromática y frescura”.
Para su elaboración se ha llevado a cabo una vendimia manual y una selección de racimo en bodega. Posteriormente, ha fermentado con levaduras naturales del propio viñedo y se ha seleccionado únicamente el vino de lágrima. La fermentación maloláctica se ha realizado en barrica nueva y barrica usada y después se ha continuado la crianza en barricas de roble francés y americano durante 15 meses.
Quinta Negredo Coto Redondo 2014 (Vino de la Tierra de Castilla y León) está elaborado con las variedades Tempranillo 90%, Mencía 5% y Garnacha Tintorera 5%. De color rojo picota con reflejos cereza, posee aromas de fruta negra (mora y grosella) acompañados de notas de coco y especiadas. Destaca un ligero recuerdo a café tostado, notas de vainilla y caramelo con un fondo mineral. En boca es intenso y sedoso, con entrada fresca y recuerdos a sabores balsámicos y especiados, notas de frutas negras, azúcar quemado y ligero postgusto de vainilla y coco.