BODEGAS PAGOS DE ARAIZ vive días de estreno e ilusión. Y lo ha denominado bajo un lema: “Good times. Good wines”. Por un lado, ha renovado el diseño de todos sus vinos unificando la imagen que aparece en las etiquetas de su gama principal, modernizándola y adaptándola a los nuevos gustos de sus consumidores y, por supuesto, a los nuevos tiempos.
Esta nueva imagen evoca los motivos florales y la gama cromática que se aprecia en los aromas y sabores que emanan de estos vinos y de este entrañable entorno vitivinícola a las afueras de la villa medieval de Olite, en Navarra.
La otra novedad es que Pagos de Araiz lanza una nueva referencia: “Pagos de Araiz Rosé”, con un color rosado pálido característico, que completa la gama de vinos de una bodega moderna y creativa que, junto con la línea Blaneo compuesta por un Syrah y un Chardonnay, y los tintos de Pagos de Araiz Roble y Pagos de Araiz Crianza, integra una familia de vinos de referencia de Navarra.
Estos dos últimos vinos referenciados, han sido reconocidos recientemente con medallas de Oro en el Concurso Internacional Virtus y Pagos de Araiz Roble considerado Mejor Vino Tinto Roble de la DO Navarra 2020. Una prueba más del mimo y tesón con el que elabora el grupo vitivinícola Masaveu Bodegas.
Pagos de Araiz estrena también una nueva página web, www.bodegaspagosdearaiz.com, en la que los usuarios, además de encontrar información sobre la bodega, sus vinos y las experiencias enoturísticas que ofrece, pueden apreciar espectaculares paisajes y escenas de la bodega y los viñedos en periodo de vendimia. Todo bajo un criterio universal que conforma la historia del vino y que da identidad a su lema: «Good times. Good wines».
Bodegas Pagos de Araiz
Con la adquisición de la Finca de Pagos de Araiz en Olite, por la familia Masaveu en el año 2000, germinó un proyecto fresco y atrevido en la tradicional D.O. Navarra. Esta apuesta comenzó con la construcción de una bodega absolutamente vanguardista de 14.000 m2 y de estilo château situada a las afueras de la villa medieval Olite. En los tres años siguientes, se plantaron, en esa finca de 400 hectáreas, 240 de viñedos propios alrededor de las instalaciones de distintas variedades de uvas (tempranillo, graciano, garnacha, merlot, cabernet sauvignon y syrah).
Su innovadora forma de gestión y una amplia, natural y vitivinícola del entorno con el arte oferta enoturística, conecta Pagos de Araiz al peso histórico y la gastronomía. Es el marco ideal de un futuro brillante y prometedor, vinculado a los valores de Navarra, territorio vitivinícola clásico y emergente al mismo tiempo.
Los esmerados cuidados en el viñedo y en la bodega constituyen el éxito de su desarrollo enológico, enlazando las plantaciones con una tecnología puntera de última generación, que junto con los procedimientos de control pioneros, dan como resultado una elaboración media de 500.000 botellas anuales.
Bodegas Masaveu
La familia Masaveu comienza a invertir en el sector vitivinícola en el año 1974, cuando adquiere Bodegas Murua, pero las plantaciones de viñedo de la familia datan de mediados del siglo XIX, concretamente en Castellar del Vallés de donde es originaria la familia y donde Federico Masaveu Rivell inició los pasos que un siglo más tarde continuarían sus descendientes.
Desde entonces, Bodegas Masaveu ha ido creciendo hasta convertirse en un referente, por la calidad en la elaboración de sus vinos en diferentes DO´s y por la filosofía medio ambiental que demuestran y el máximo respeto a la tierra, en las que posee sus propias plantaciones de viñedos, gracias a las cuales logran transmitir, en cada botella, la personalidad única de cada terroir. De esta forma, se unen en un denominador común todos y cada uno de los proyectos que embarca Masaveu Bodegas en diferentes regiones: Murua (DOCa Rioja), Fillaboa (DO Rias Baixas), Pagos de Araiz (DO Navarra), Leda (Vino de la Tierra de Castilla y León) y Valverán (Asturias).