La bodega ha colaborado en la colocación de varios sensores en el glaciar rocoso de Cotiella, en el Alto Aragón (Huesca), para investigar si sigue activo.
La acción se enmarca en ‘Vidas’, una iniciativa medioambiental de Viñas del Vero que financiará varios proyectos centrados en la sostenibilidad y la preservación del medio natural.
La bodega D.O. Somontano afianza su compromiso con la defensa del entorno y el medio ambiente. Lo hace con “Vidas”, la iniciativa con la que Viñas del Vero contribuye a construir un mundo mejor apoyando proyectos concretos, con un claro compromiso ambiental y orientados a preservar y recuperar la salud del planeta. Para alcanzar este fin, “Vidas” apoyará diversas iniciativas, anónimas o desconocidas, tras las que se encuentran personas con una conciencia ambiental sólida. Personas que ponen su esfuerzo al servicio de la conservación y recuperación de la salud de la Tierra. La primera muestra es “El Glaciar oculto de Cotiella”
Cada año desde 2003, el 11 de diciembre se celebra el “Día Internacional de las Montañas”, cuyo objetivo es concienciar sobre su biodiversidad y combatir las amenazas a las que se enfrentan. Y es que, según datos de la Organización de las Naciones Unidas, las montañas albergan el 15% de la población mundial y casi el 50% de la reserva de la diversidad biológica.
Sus glaciares constituyen una riqueza geológica y medioambiental incomparable, pero el aumento de las temperaturas acelera su desaparición. De acuerdo con un estudio del Observatorio Pirenaico de Cambio Climático (OPCC), se calcula que desde el año 1984, y hasta 2016, ha desparecido una superficie glaciar equivalente a 516 hectáreas.
Ante esta situación, se está llevando a cabo una investigación para constatar la posibilidad de que el glaciar rocoso del macizo de Cotiella, en pleno corazón del Pirineo oscense, continúe activo. Se trata de un estudio iniciado por la bióloga y educadora ambiental, Helena Parga, que está siendo posible gracias a la colaboración de Viñas del Vero. La bodega ha colaborado con la instalación de varios sensores en el glaciar para monitorizar los cambios de temperatura que se detecten.
Con esta acción de apoyo enmarcada en el proyecto “Vidas”, Viñas del Vero da un paso más en su filosofía de preservar el medio y que le permite obtener una uva de calidad, plantada en suelos sanos y regada con aguas limpias. Cada uno de estos proyectos será un episodio de una serie de reportajes que los expliquen y divulguen.
“El Glaciar oculto de Cotiella” es su primer capítulo y explica el apoyo al proyecto impulsado por Helena Parga, bióloga, con el nombre “Tras las huellas del glaciar” que, además de constatar su actividad, busca aumentar la conciencia medioambiental de la sociedad. “La historia del Pirineo es nuestra propia historia. Nos ubica en el presente y nos hace dueños de la decisión de hacia dónde queremos ir”, explica la bióloga afincada en Benasque. Su estudio partió de la base de la tesis doctoral de Ánchel Belmonte, doctor en Geología y coordinador científico del Geoparque Mundial de la Unesco Sobrarbe-Pirineos. “El estudio del glaciar rocoso de Cotiella comenzó con mi tesis doctoral hace ya años y fue Helena la que tiempo después me animó a volver a este sitio y seguir estudiándolo”, señala Belmonte.
Con los sensores adquiridos por Viñas del Vero será posible medir, de forma continuada, la temperatura del glaciar, mientras que el movimiento se medirá mediante ortofotografías. Posteriormente, toda la información recabada se cederá al Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Zaragoza, que la procesará para elaborar sus propias conclusiones.
Ver aquí “El Glaciar oculto de Cotiella”