V Malcorta 2019, uno de los vinos más exclusivos de Javier Sanz Viticultor, ya está en el mercado. Tras 5 meses de crianza sobre lías la bodega pone a la venta las 12.000 botellas de esta añada 2019, caracterizada por su gran potencial aromático y por una excelente calidad -debido a una vendimia marcada por una magnífica maduración fenólica-.
Según Javier Sanz, con esta añada nos encontramos ante un vino “de gran calidad”, asociado, según el viticultor, al “perfecto estado sanitario de la uva debido al clima de los meses previos a la vendimia».
Características
V Malcorta 2019 es un vino muy equilibrado, con elegantes flores blancas en nariz y fondo de aromas cítricos, así como una potente acidez natural en boca (característica propia de la uva Malcorta, variante de la Verdejo), gran persistencia y tonos minerales; características que lo diferencian y hacen único.
Las primeras botellas de esta nueva añada salieron de bodega a comienzos de este mes y pueden adquirirse por las vías habituales de venta.
V Malcorta, un verdejo único
V Malcorta se elabora con un clon de la variedad verdejo. La Malcorta estaba en proceso de desaparición debido a la dificultad de vendimiarlo a mano (de ahí su nombre ‘mal- corta’).
Javier Sanz, por su parte, inició hace más de 20 años un proyecto de recuperación genética, rescató algunas cepas de este antiguo clon autóctono de La Seca (Valladolid) y tras años de investigación y reproducción del gen comenzó a elaborar este vino monovarietal.
Esto supone que, actualmente, Javier Sanz Viticultor es la única bodega que lo comercializa en exclusiva.
Este proyecto va en línea del trabajo continuo desarrollado por la bodega, caracterizado por la producción de vinos únicos desde la propia cepa. V Malcorta forma parte de la Colección V, gama donde el consumidor puede encontrar los vinos más especiales de la compañía, de ediciones limitadas y con características únicas.
En ella encontramos V 1863, V Dulce de Invierno y V Colorado, el único vino tinto de la colección, de genética única y desconocida.
