CVNE ha arrancado esta semana la vendimia en Rioja. Como es habitual, la recogida ha comenzado por Rioja Alavesa, concretamente en Viñedos del Contino, continuará por Viña Real, y finalizará en Rioja Alta con CVNE. Se prevé una cosecha de alta calidad, tanto en tintos como en blancos, gracias a la combinación de un verano especialmente seco con precipitaciones a principios de septiembre, que supusieron el empujón definitivo para la fase de maduración de las uvas.
Por su parte, en los viñedos de CVNE en Rioja Alta, se calcula que no comenzará hasta la semana que viene, lo que supone un retraso de aproximadamente 10 días respecto a la vendimia de 2020, pero teniendo en cuenta que la pasada campaña se adelantó como consecuencia del cambio climático, este retraso es solo relativo, e indica la buena salud de las cepas riojanas. Las lluvias que acompañaron a la época de floración han traído racimos muy sueltos, lo que indica la alta calidad de la uva, por lo que se prevé una añada de buena calidad.
CVNE también está presente en la DO Valdeorras, con la bodega Virgen del Galir, donde la vendimia comenzó el pasado 1 de septiembre, en fechas aproximadas al año pasado. Al tratarse de bancales, la vendimia tiene mayor duración, porque es necesario adaptar los procesos de recogida para salvar las diferentes alturas de la viña. Además, este año se va a prestar más atención a la preservación de aromas naturales de la uva, cosechando una fruta más fresca y menos madura que otros años, por lo que se espera una vendimia con resultados muy interesantes y de gran calidad.
En Ribera de Duero, donde CVNE cuenta con la bodega Bela, se prevé que la vendimia se retrase hasta principios de octubre. Cabe destacar las buenas expectativas con los terrenos de Villalba de Duero, que han tenido un año bastante seco y debido a este estrés hídrico en la época de cuajado, se espera una muy buena calidad de la uva, de muy alta calidad.